Mientras los políticos siguen peleándose por controlar jirones del espectro radioeléctrico, por ponerle un peaje a todas las puertas de la ciudadela, a sus espaldas se levanta una ola gigantesca que lo barrerá todo.
Se llama La Red, y está creando una nueva cultura, un nuevo mundo. Portales de La Red, como You Tube o Pitchfork son sólo sus heraldos.
Y como sucede con las grandes olas, podemos optar por tratar de huir, nadar desperadamente para ser finalmente engullidos, o bien por encaramarnos a ellas y disfrutar del viaje de nuestra vida.